jueves, agosto 25, 2011

Un invento argentino facilita el parto.

(Los acentos fueron obviados por cuestiones tecnicas)

Fue creado y desarrollado por un mecanico; ya se utilizo con exito en once nacimientos.

Todo comenzo con una apuesta en un asado. Jorge Odon, mecanico e inventor con varias patentes en su haber, le aposto a su amigo Carlos Modena que era capaz de sacar un corcho del interior de una botella vacia valiendose de una bolsita. El truco es un clasico que, bien realizado, es infalible, por lo que Odon gano la apuesta.

Pero esa misma noche, mientras dormia, lo sobresalto una idea. Desperto a su mujer y le dijo: "Viste lo del corchito, sirve para facilitar el parto". Su mujer se dio media vuelta y siguio durmiendo.

Desde entonces pasaron 5 años, en los que el dispositivo para facilitar el parto, que invento basandose en los principios que permiten sacar el corcho de la botella, cosecho numerosos premios. Como el de la convocatoria Saving Lives at Birth: a Grand Challenge for Development, organizada, entre otros, por la Fundacion Bill y Melinda Gates, en busca de inventos que prevengan muertes durante el parto, y el del I Foro Mundial de Innovacion Medica, realizado en Tailandia, donde fue elegido uno de los 10 inventos mas sobresalientes.

Pero quiza lo mas importante es que el dispositivo Odon ya ha sido probado con exito en 11 partos, como parte de un protoloco de investigacion que lleva adelante el Departamento de Ginecologia y Obstetricia del Cemic, con el apoyo del Departamento de Salud Reproductiva de la Organizacion Mundial de la Salud (OMS).

"Es un dispositivo pensado para facilitar el parto durante el llamado periodo expulsivo prolongado, que es cuando la mujer tiene la maxima dilatacion, esta pujando, pero el parto no se produce", explica el doctor Hugo Krupitzi, uno de los investigadores principales del proyecto, que recuerda que la prolongacion del periodo expulsivo se asocia con riesgos para la madre y su hijo.

"La ventaja es que es un dispositivo de bajo costo y facil de implementar", agrega el doctor Angel Fiorillo, jefe del Departamento de Ginecologia y Obstetricia del Cemic. "Puede ser utilizado en lugares donde no hay formas de solucionar esa situacion, como en el Africa subsahariana, donde no se puede hacer una cesarea ni emplear forceps. O en sitios donde si se pueden emplear esos metodos, donde utilizado como primera opcion podria ayudar a reducir la tasa de cesareas", completa otros de los investigadores principales del proyecto, el doctor Javier Schvartzman.

Otros potenciales beneficios del uso del dispositivo Odon es disminuir el riesgo de infecciones perinatales, como la transmision madre-hijo del VIH, y el riesgo de hemorragias posparto. Pero eso debera ser demostrado por el programa de estudios clinicos, que comenzo en marzo de este año.

Una botella en un maletin

Pero volvamos a los dias posteriores al asado germinal. "Lo llame a Carlos [Modena] para decirle que lo del corchito servia para facilitar el parto. Me corto; creia que lo estaba cargando", dice Odon. A los pocos dias, insistio y logro sumarlo al proyecto.

Odon desarrollo entonces un primer prototipo del dispositivo, que consistia en dos bolsitas que, introducidas en el utero materno, permitirian sacar al bebe, y comenzaron a probarlo en un utero de vidrio creado para tal efecto. "El paso siguiente, antes de patentarlo, fue hacer una investigacion internacional para ver si no existia algo parecido", cuenta Modena.

Con el dispositivo patentado, a Odon y Modena les recomendaron acudir al doctor Enrique Gadow, ex jefe de Obstetricia y Ginecologia del Cemic -que actualmente preside su comision directiva-, y que los derivo a la oficina de Schvartzman.

Y hacia alli fueron. "Al principio, parecia una cargada -recuerda Schvartzman-, porque sin mediar palabra abren un maletin y sacan una botella con un corcho adentro. Me dicen: «Doctor, trate de sacar el corcho». Yo les digo que no se como, y me hacen la demostracion. Cuando el corcho sale, es algo inquietante..."

Los investigadores del Cemic se sumaron al proyecto, proponiendo incluso cambios, como reemplazar las dos bolsas que debian envolver todo el cuerpo del bebe por una sola, para envolverle la cabeza. Llegado ese punto, habia que superar un escollo: encontrar un modelo de utero con mayor peso cientifico que el que venian usando hasta entonces, que permitiera validar el dispositivo para asi pasar a su prueba en seres humanos.

De visita en Buenos Aires se encontraba Mario Merialdi, de la OMS. Gadow hizo el puente para que Odon fuera a mostrarle el dispositivo. "Iban a ser 10 minutos, pero terminamos hablando una hora", dice Odon. Merialdi gestiono a traves de la OMS la visita del equipo de investigadores a la Universidad Des Moines, en Iowa, Estados Unidos, que posee los mejores simuladores de parto del mundo.

El camino recorrido por el dispositivo Odon luego de la visita a Des Moines puede resumirse de la siguiente forma: la prueba en los simuladores de parto fue exitosa, por lo que se dio por concluida la fase de investigacion preclinica; la presentacion del dispositivo en encuentros cientificos como los mencionados desperto gran entusiasmo (y premios); en marzo, comenzaron las pruebas en seres humanos.

Mariana Macchiarola, de 33 años, fue la paciente numero 5 en la que se probo el dispositivo. "Yo ya habia sido madre, y mi primera experiencia habia sido muy dolorosa: me habian hecho episiotomia y no pude disfrutar del momento del parto -cuenta Mariana-. Cuando nos propusieron participar del estudio, me mire entonces con mi marido y dijimos: «Vamos». Si una no esta dispuesta a probar estas cosas, la tecnologia no avanza."

Su unica inquietud previa, segun recuerda, era si, al colocar la manga en la cabeza del bebe, no se ahogaba. Schvartzman responde: "Dentro del utero, el bebe no respira. La primera respiracion ocurre cuando sale el torax y, para ese entonces, el dispositivo ya ha sido retirado".

"Leon nacio el 18 de abril; salio perfecto y no senti nada de dolor", asegura Mariana. Ya son 11 los partos realizados con el dispositivo en esta primera etapa de investigacion que, una vez concluida, dara paso a la segunda etapa, en la que el dispositivo sera probado en un numero mayor de pacientes, aqui y en Sudafrica. La tercera etapa sera un amplio estudio internacional.

Si todo sale bien, estima Krupitzi, "el dispositivo podria estar disponible en entre 3 y 5 años".

DIXIT

"Utilizado como primera opcion, podria ayudar a reducir la tasa de cesareas"

Javier Schvartzman

(Foto: Patricio Pidal / AFV)

INVESTIGADOR DEL CEMIC

Fuente: Sebastian Rios, LA NACION

1 comentario:

Anónimo dijo...

creen que podra proliferar este invento ante el negociado de las cesarias....fer